jueves, 24 de junio de 2010
175 Plomo y Cobalto
Autor*Miguel Ángel Muñoz
Una estrella de oro voló sobre mí,
Era un águila de plomo que apresaba el porvenir
Un halcón de gris cobalto que devora mi ser,
Era un buitre leonado con cara de pobre rey,
Una triste lechuza que trasforma su cantar,
En un ratón asustado que aprendiera a soñar,
Un pequeño renacuajo que escuchó hablar de amor,
Una sirena de arena que nunca encontró su dios,
Un “sólo contigo” forzado que se hundió en la raíz,
Un te quiero sin respuesta, a una dura realidad,
Un de menos, un te amo, no lo olvides jamás.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
PK me suena tan pesaroso esto???
ResponderEliminarlas letras son transparentes que nos vemos enredadas en ellas como una telaraña...
Un beso.
estas mirando solo la parte negativa. Busca la parte positiva! busca al renacuajo y preguntale. siempre hay respuesta
ResponderEliminarBenhumea, gracias por tu comentario un abrazo, te leo!
ResponderEliminarGracias Ali, tenías razón, el renacuajo tenía la razón, un beso gigante
ResponderEliminar